Y llegó el momento de regresar al fondo del mar... Y fue el 15 de Febrero. Sabroso iniciar unos días de merecidísimo descanso sumergiéndome en el fondo del mar, buceando, contemplando las maravillas del mar y su gran inmensidad. Quizás no en la mejor época del año, porque estamos en la época de agua fría y visibilidad limitada en Mochima, pero con las mismas ganas y emoción como si fuera época de aguas cálidas. Dos inmersiones, dos aventuras, dos experiencias únicas. Una misma emoción.
Comenzando inmersión
En el día disfrutamos de especies como: peces Loro, Cirujanos Azules, Langostas, un Pez León (lamentablemente bastante grande), Isabelitas, abundante micro fauna, Anémonas, Almejas, Cangrejos Araña, así como de un cardumen de Sábalos bastante grandes que nos rodeó al final de una de las inmersiones. Terminada la primera inmersión pudimos ver desde el bote una Mantarraya que lastimosamente no se nos apareció mientras buceábamos y en el inicio de la segunda inmersión se apareció un pequeño tiburón que lamentablemente no llegué a ver (y con las ganas que tengo de ver uno).
Anémona
En fin, fue una buena jornada de reencuento con los panas, de volver a la actividad que me gusta y de relajarme un poco de la ardua jornada de trabajo que me tocó afrontar en los últimos 3 meses, por lo que hacía falta un buen descanso y nada mejor que irse de buceo.
Comenzamos a prepararnos para las siguientes inmersiones con las ganas de seguir disfrutando del mar y su inmensidad y de seguir plasmando en notas, fotos y videos toda su majestuosidad.
Seguimos Buce-ANDO...
"Cuando quieras algo que nunca has tenido, tienes que hacer algo que nunca has hecho"